domingo, 28 de agosto de 2005

No son gotas de lluvia

No hay nada que detenga la ilusión, aquello que se eleva a la velocidad de la luz y luego es cuando llueve, que parece que se deshiela, que no son gotas de lluvia, es que se exprime lo que soñamos allá muy alto, hasta donde se van los globos de helio.
Me recuerda aquel sueño en el que llovía mucho, y nos mojabamos Sergio y yo en las calles de allá por el Obispado... y me preguntaba: "¿me quieres?"... o aquella lluvia en la parada de camión en Halifax de la mano de Fabián, de la mano de sus ojos azules inolvidables... o la lluvia intensa de una noche como la que ahogó el auto de Homero y nuestros labios...etc. etc... la lluvia entre Roswell y Las Vegas...no es lluvia...