jueves, 26 de octubre de 2006

martes, 24 de octubre de 2006

La muerte y yo. Nuestra relación

“En señal que te vas
vas dejando
tu orgullo detrás
pero quieres hablarme
yo no se para qué
si me vas a dejar.
Tú tenías el amor
y lo fuiste
a entregar por ahí
y la muerte que un día
para ti querías
me la das a mí.
Pero habla, habla, habla
Hasta que quedes
Vacía de palabras
Más si quieres
que hablemos
de amor
Vamos a quedarnos
callados
Luego en la intimidad
sin complejos
del bien ni del mal
Y en tu pelo travieso
que peinan mis besos
irá la señal.”

Alvaro Carrillo




¿Cuál es mi relación con la muerte? Cuánta lluvía. Hace un par de horas me llamaron para avisarme de golpetazo que Rafael Ramírez Heredia había muerto. Iba conduciendo, dije ¡¿Qué?! Orillé el auto al espacio disponible más cercano. No me vino a la cabeza pensar esas cosas de “a todos nos tiene que ocurrir”, “descanse en paz”, “así tenía que ser algún día”, o qué se yo cosas que se piensan con resignación. No me vino a la cabeza nada de eso. Sentí un breve vértigo. Un silencio. Y luego ahí me tuve que quedar un rato, porque mis ojos no podían ver claro con tanta lluvia que traían dentro...Escribo y siento. Necesito decirlo ahora, quizás pasen muchos años o nunca llegue el día en que vuelva a retomar este momento de vacío. Traigo en mi cabeza un collage de imágenes de todo lo que se relaciona con Rafael. Esa canción de Alvaro Carrillo es la que Rafael solía cantar hace al menos ocho años en el Bar El Reforma con los tríos que siempre están ahí y que hasta hace unos días volví a ver y volvieron a despertar la voz de Rafael en mi memoria. Rafael era mi amigo, llegó a ser mi confidente, mi consejero, lo pierdo a él y pierdo un pedazo de mi. Podría decir muchas muchas cosas de todo lo que sentí por Rafael y lo que siento ahora. Cosas muy bellas. Que describirían desde su porte al caminar, el caballero que era, sus manos pequeñas lisitas, su timbre de voz, y cosas que solo las personas que lo llegaron a tratar podrían reconocer.
Pero no quiero hacer este post largo. Concluyo: No soporto que la gente se muera. No tengo la capacidad de visualizar el espacio que deja su ausencia en mi. No puedo hacerme a la idea, no deseo que se muera nadie, no me resigno, no me gusta perder fragmentos de mi bajo esa tierra que sepulta a mis muertos. Aún no supero la muerte de mi abuela Carmelita, ni la de Andresito Huerta, ni la de mi tío Chemita. Escribo y siento. Todavía me hace falta el afecto mi tío Sergio, extraño un abrazo del doctor José Pablo, me duele la imposibilidad hasta de no poder conversar otra vez con Juan O´neill, o abrazar a la chiquitita de mi tía María. Admiro las festividades del dos de noviembre, pero no me gusta la muerte, para mi no hay fiesta. No puedo. Quiero que todos sean eternos. Tengo ganas de pedirle a toda la gente que quiero que no se muera, de exigirles que no me dejen huecos de estos. Sigue lloviendo. No me imagino la ausencia de Rafael, nomás no me la imagino.

lunes, 23 de octubre de 2006

Cuando me acarician
tus manos son como flechas
que me van matando

me desangro
otra vez estoy manchando esta página de ti

por la herida
de nuevo se escurre
el dolor de tenerte
el dolor de esas afiladas puntas de flecha.
Qué cosa es el amor,
medio pariente del dolor...


así es...

domingo, 22 de octubre de 2006

de mangos...y memorias...


"Entonces Mars le estrecha la mano a papá en ese saludo de solidaridad de la raza, como del poder chicano, y papá, que siempre está echando pestes contra los chicanos, el mismo papá que dice que los chicanos son unos exagerados, vulgarones, pachucos, leguleyos, marihuanos, que se han olvidado de que son - mexicanos mexicanos -, nos sorprende a todos. Papá le devuelve el saludo de solidaridad"

Sandra Cisneros, Caramelo pg. 344 Ed. Seix Barral

De todo lo bueno que me dejó la convivencia con mi exmarido, de lo mejor fue el haber conocido a la escritora Sandra Cisneros y haberle tomado gusto e interés. Ayer tuve la oportunidad de ir a escucharla a la FIL, y para mi sorpresa resultó ser una persona de una calidad humana extraordinaria. Irradiaba mucha alegría, energía y seguridad en si misma sobre todo al hablar en español, un español de hija, como ella se justificó. "Hace mucho ruido como en la casa de mi mamá", así empezó la platica, igual que su manera de narrar. Yo tendía mucho que decir sobre lo que entiendo de los chicanos y chicanas con quienes he convivido. Nicolás podría decirse que es más chicano que mexicano y cuando me dice "hazle el trai" o "ay te miro" o "guacha la tele"...entre muchas otras cosas que dice al natural, aunque es nacido en México. Pero no me sale el orden de lo que entiendo.
Las experiencias que narra Cisneros siempre nos identifican con lo que somos como mexicanos. Apesar de que ella es nacida en Chicago. Recuerdo muy bien un pasaje donde menciona la repugnancia que le da comer cornflakes con leche caliente como se los servian en México, y recordé mi casa...en fin, que verla personalmente me ayudó mucho a visualizar más todo lo que ha querido explicar.
A partir de que ella explicó que Caramelo surgió de un cuento de once páginas que iba creciendo y creciendo hasta que su editora le dijo que no era cuento si no novela y tardo once años en terminarla, y dicho cuento comenzó de una experiencia que ella tuvo en un viaje a Acapulco con su familia; yo le pregunté lo siguiente: ¿hasta que punto entonces es autobiográfico el personaje de Lala, y hasta que punto llega a ser ficción, si todo surgió de la memoria?
Sandra me respondió que gran parte de la novela es ficción a partir de la realidad, porque ella, como muchos mexicanos somos parte de las familias que guardan misterios y nunca dicen nada. Es díficil enterarnos de la verdad cuando preguntamos qué pasó con el abuelo y luego resulta que hay varias versiones y no se sabe nunca. Así, ella utilizó alguna versión y la modificó con otra historia que ella se imaginaba que era la de verdad que le querían ocultar. Mediante fotografías antiguas de personas desconocidas inventó historias que fue añadiendo y sucesivamente la novela tomo forma. Dijo muchas otras cosas de mejor manera que yo puedo recordar para escribirlas, pero sí quiero compartir con ustedes la experiencia de haberla conocido. Lo de los mangos...ah...es que los mangos de manila no se venden en USA...y son deliciosos, exquisitos...

jueves, 19 de octubre de 2006

La FIL


Hoy leí en los ¨Días Feriados¨ de la Feria Internacional del Libro de Monterrey junto con otros compañeros que quiero mucho como Fernando J, Elizondo y Zacarías Jimenez. También la agradable compañia de Nohemí Zavala, Gaby Torres y Natalia Rodríguez Luna.

Fuí la primera en leer a pesar de que le sigo a Zacarías en el orden alfabético. Así que algunas personas que asistieron no alcanzaron mi lectura: Jessica Toscano y su novio, Quique y Megumi, les agradezco mucho haber ido. También gracias a Ismael Fernandez, a Nydia Villarreal y a Aarón H. y a los muchas otras personas conocidas que estaban ahí.


No he podido ir a los otros días feriados, ayer llegue tarde y había gente a reventar, así que expreso mis disculpas a mis otros compañeros escritores de Nuevo Léon. Saludos a Yamín, onde andes, a Rogelio, onde estes, y a Susana López Rodríguez en Granada, gracias por tus letras Susi, te responderé pronto.

sábado, 14 de octubre de 2006

Mis abuelos, Almita y Armando.
Un vampirillo, mi sobrino Christian y mi primito el más chiquito de todos mis primos, el travieso Chaguillo...

Adriana y yo, antes de que la deje de ver por tres semanas...

Mi hermano y los nuevos miembros de la familia: los Higashiyama. El único que falta es Andivi, pero el llega en enero.

Hoy de las cosas más bellas que vi, fue esta rosa afuera de mi casa. El resto fue mi familia tan especial y bella como siempre.

jueves, 12 de octubre de 2006


Una de las tantas iglesias de Nuevo México de herencia española.


No se como describir esta etapa de mi vida. Es algo entre la plenitud y la incertidumbre. Mi concepto de la soledad cambia día con día. Administro mi tiempo de una manera que no me gusta, estoy confundida casi todo el tiempo. Pero menciono a la plenitud porque nunca me sentí tan, digamos, a mis anchas aquí en esta ciudad. Lejos sí, pero aquí siempre será diferente.

Nosotras

Casi casi teniamos desde la prepa sin vernos. A mi lado Brenda, Jessica y Nydia. Faltó Karla y espero que pueda tener otra foto con ella. También extraño a Gloria Colunga. ¿Dónde andará?En fin, recordamos cosas y nos la pasamos bien. Un saludo chicas! besos.

viernes, 6 de octubre de 2006

Desde hace tiempo que quería subir la foto del sandwich que Mace me recomendó fotografiar. No se cocinar bien, pero un sandwich sí me sale.

Una vaca


que significa que....pues....que la voy a poner en mi refri, que ya como me dijo Yamín no sea "vaquetona"...en fin...es una vaca de Los Montoyas, NM. Una comadre de por allá...jaja.